jueves, 8 de febrero de 2007

Mi primer sopena.

A mis amigos les encanta entrar a mi cuarto, según ellos porque siempre encuentran algo que los descuadra; sin embargo los más asiduos, irónicamente, lo encuentran algo cargado. ¿De qué? no sé, debe ser de pasión... ja. Por ahí tengo un montón de cosas guardadas pero bien ubicadas, desde películas hasta postales y fotos antiguas. Pues bien, el otro día una polizonte entró a mi cuarto y, sin darme cuenta, tomo de mi cama un libro con las tres primeras páginas subrayadas. Me miró y se rió, la miré y puse mi cara de que rayos pasa. Minutos más tarde lo comprendí,resulta que mientras mirábamos una película de Godard , que por cierto no le gustó, me empezó a decir que la semiótica era aburrida. La mire y con un gesto medio dudoso le dije...mmm algo..., asu vez, le pregunte a que se debía aquel comentario.Y , sigilosamente, me dijo que era por el libro que estaba leyendo. Mire mi mesa de noche y ahí estaba mi libro de tapa negra, Semiótica del texto fílmico, por Desiderio Blanco. Reconozco que el libro es difícil de entender, hace poco llego a mis manos y me emocione tanto que decidí algún día terminarlo; lo más antes posible.En aquella escena hice un flash back,encontrandome con el libro en la mano,y descubriendo que había varios términos que no conocía y,en aquel momento, busque un diccionario. Entusiasmada fui al "cuarto de estudió", saque un diccionario grande y baje por las escaleras que dan para la cocina. Una vez con un lapicero, el diccionario, el libro y un papel en los brazos me dirigí a la sala, pero antes me prepare un juguito de naranja. Cuando mi dedo empezó a buscar una palabra sentí la hoja arisca, como no me importo mucho seguí buscándola hasta que la encontré. A pesar de ello, cuando encontré la palabra me metieron otras palabras aún más raras. Busque esas palabras raras y me llevaban a otras y así sucesivamente. Entonces fue ahí que vino a mi mente, el olor de aquellas páginas viejas y el color de aquellos dibujos exquisitos del famoso " Mi primer Sopena”. No voy a negar que sí, me gustaban harto los dibujitos, pues, soñaba con ellos. No es broma. Lo que más recuerdo es el zoológico, el payaso, los pescados que me daban miedo, entre otros. Pero lo más resaltante son los significados de las palabras, ya que no te la complicaban tanto como en los diccionarios poseeros. Ósea esta bien que sean para grandes, pero ya .Bueno de chiquita me bronquie con las mates y decidí escribir tontera y media; sobre el mar, el sol,etc etc, pero a mi modo. Creo que por ello cuando lleve lengua en la universidad me hueviaba. Fácil nesecitaba de mi primer sopena...je,aquellos tiempos, aquellos años.Retomando a la escena de mi vida surreal, al final voltie la mirada hacia la polizonte, y le dije que nunca comprenderiamos todas las cosas del universo, menos de los humanos.