lunes, 11 de junio de 2007

Una carta de un ser creado por unas ninfas verdes.





Señor, De Nocturnidad:

Inmiscuyéndome en su apacible confianza, me atrevo a pedirle un consejo para mis frustrantes pasiones.

Temo escribir unas líneas para ella: mí querida amiga del mundo de rayuela, de los cronopios y de las famas. Yo, como buen ser de la nada, creado por unas agradables ninfas verdes, al parecer, creo saber algo más de aquella niña indescifrada .Y es que dicen que todos cantan, y es que dicen que todos danzan.

Parece volver a sentir algo extraño, ya que la pille el viernes junto a la soledad. Y es que ella, a veces, suele llamarla. ¿Usted la debe de conocer?... porque ella a usted…creo que hasta lo sueña.

Ese mismo día.Del ultimó escalón, que parecía ser el cielo ¡muy alto!! muy alto! cayó una hoja al pavimento. Ella,la dueña de la hoja, bajo corriendo y no encontró nada, pues, yo ya había cogido aquel misterioso boceto.

En la hoja había tres poemas escritos. Inmediatamente, los borrones y las cenizas de cigarros embusteros, que daban un aroma propio a la tinta indescifrable, hacían de la hoja arrancada ,de la agenda Neruda, un cuadro impresionista .Al levantar la mirada me oculte,y vi el bostezo de sus años que cubría ,ligeramente, su cabello negro intenso.

Me quede soñando con sus sueños y con sus pequeñas locuras. Sentí un poco de ella cuando empecé a leer algo de aquí y algo de halla. Y creo poner solo una parte de aquel planfeto. Sin embargo, antes de citar su hoja caída, déjeme expresarle mi acotación reo de nocturnidad, aquella acotación que hice sobre la mirada de aquella niña indescifrada.

Se que ella apunta desde sus entrañas algo más que su elocuencia, se que apunta de la nada y eso ¡me asusta! Astuta escritora. Le pienso, pues, para decirle que soy aquel personaje de sus entrañas porque no hay cronopios sin famas, creo yo. Exijo una respuesta de mi querida amiga, exijo un angelito de Botecillo antes de dormirme...

Y es que señor, me han dicho por ahí, que ella actuó así el viernes después de ver a un ser olvidado. Quisiera decirle a la cronopia frustrante que la adoro sin conocerla en la cesta de la esquin y en la cesta de la nada.

Aqui pues, citando un fragmento de la hoja caída:

“Plano general de la nada, entra en primer plano el ruido del candor.

Te explico el hecho maltrecho… ¡va! Si ni siquiera mi aliento lo logra descifrar…
Simplemente cosas.¡que quieres que piense?... ¿¡que ocurre, en verdad!?

Va … sino existe la noción del amor , el hombre lo ha inventado…ese amor es una enfermedad… el amor es una enfermedad… ¿ en verdad, lo amo?

Pues ¿necesito que me digas algo?... estas caminando sin caminar, y me miras sin mirar .Sabes, te estoy empezando a odiar… y se que no puedo sentir nada…a ti nunca.

Ya no entiendo tu mirada .No entiendo, ya, tus andadas. A pesar, te adoro.
Porque…

Como aquellos momentos
Como aquel sutil aire,
Como aquellas arrugadas hojas
Con tinta indecisa
Sentí mucho de ti,
Sin tocar el cielo
Sin retroceder el tiempo.


Cuantas caricias
Sin tocar,
Cuantos delirios
Con chocolate embarrado,
En una anclada mirada.

Un desahogo va empapando mi vida
Y te confundí con mis pensamientos,
Te confundí con el destierro,
Entonces,
Disfrute la tristeza
Recién horneada de la conciencia

Me di cuenta de la luna sin sol
M e di cuenta que se me escapa mi respirar
Me di cuenta que te extraño sin extrañarte,
Sin nunca palparte.

Unas descalzas estrellas
Forjan mi arena
Con huellas y sin ti.

Sale plano detalle de los desesperanzados sacos negros.”


Y es que por respeto a la niña indescifrada no pongo los demás .
ninfas verdes.
escrita por mí ,claro